Ayer estuve viendo un reportaje en Televisión Española Internacional sobre los problemas de los jóvenes, y no tan jóvenes, a la hora de buscar una casa o un piso digno para vivir en estos tiempos de crisis que corren hoy día en España. Fue deprimente ver cómo los jóvenes, sobre todo de Madrid y Barcelona, casi tienen que mendigar para vivir en un piso de apenas 40, 50 ó 60 metros cuadrados que cuesta alrededor de 800 euros.
Mucha gente me pregunta que hago aquí, tan lejos de mi casa, lejos de mi familia, lejos del primer mundo. Anoche, tras el programa, encontré una razón de peso que se une a una larga lista encabezada, como siempre y para siempre por mi razón absoluta: Cecy. Tras ver el programa y pensar en la dura situación que se está viviendo en España con esto de la crisis, recordé mi año de estudiante en Madrid, cuando compartí piso con una compañera de clases, Laura. Los pisos estaban por las nubes y muchos de ellos eran infrahumanos. Al final vivimos casi en un paraíso y siempre recuerdo ese año como mi último año de cosmopolita, o por lo menos, mi último descanso de cosmopolita...
21 sept 2008
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